Dr Carlos Basanta
Lunes, 11 de Marzo de 2013
Día Mundial del Riñón 2013
Riñones para la vida, detener el ataque al riñón
Este jueves se estará celebrando el Día Mundial del Riñón,
el cual es una iniciativa del esfuerzo conjunto de la Sociedad Internacional de
Nefrología y la Fundación Internacional Federal del Riñón, siendo celebrado por
primera vez en el 2006, fijándose como fecha para los años venideros el segundo
jueves de cada mes de marzo. No es una fecha de onomástico ni de cumpleaños de
vida ganada, es más bien una fecha para evitar la muerte, para prevenir sus
causas, alertar de la importancia de nuestros riñones para mantenernos vivos y
con una buena calidad de vida, llevar el mensaje a la comunidad de que el riñón
se enferma y que su expresión va más allá de las creencias clásicas de
infección y dolor de espalda, un riñón enfermo se manifiesta en todo el
organismo, los riñones tienen una altísima susceptibilidad a sufrir
alteraciones por muchas causas, pudiendo llegar en muchísimos caso a enfermedad
renal terminal, donde la única solución para continuar viviendo lo constituye
la diálisis o el trasplante de riñón. Cada año los eventos se enmarcan bajo un
eslogan distinto, en esta oportunidad la Sociedad Internacional de Nefrología
propuso resaltar la importancia de detener el daño renal agudo, dando a conocer
los factores productores de esta situación: la consigna para el 2013 es Riñones
para la vida, detener el ataque al riñón.
El Día Mundial del Riñón es una oportunidad de crear
conciencia, de cuidar cada día nuestra salud y que del cuido del riñón depende
en gran medida su mantenimiento. Momento para aprender, recordar y tener
presente que existen situaciones que pueden dañar los riñones y que debemos
evitar o controlar. Son los factores de riesgo para enfermedad renal crónica, y
dentro de ellos los más importantes son la diabetes, la hipertensión arterial,
las enfermedades cardiovasculares, historia familiar de enfermedad renal, el
uso prolongado de algunos medicamentos, sobre todo aquellos automedicados,
problemas con las grasas como el colesterol alto, la obesidad, la edad mayor de
60 años, aunque también aparece en niños y adultos jóvenes, las infecciones
urinarias y los cálculos renales, Incluso el bajo peso al nacer y otro veneno
que actúa directa e indirectamente que es el cigarrillo. Todos ellos
susceptibles a cambios de estilo de vida.
Los riñones son los encargados de eliminar los excesos, es
obligatorio el paso de toda la sangre de nuestro cuerpo por esa alcabala
orgánica para ser revisada, alrededor de 200 litros de sangre filtran los
riñones cada día para eliminar las toxinas, el exceso de agua, producir glóbulos
rojos si nos hacen falta, controlar la presión arterial y mantenernos sanos,
esta habilidad de vigilancia y filtrado se puede perder gradualmente y sin
avisar produciéndose entonces una enfermedad renal crónica, cuyas estadísticas
reales no conocemos ni en nuestro país ni en el mundo entero, porque las cifras
oficiales solo reportan a los enfermos que necesitan diálisis o trasplantes que
están en etapa terminal, el resto son estimaciones y malas por cierto. Se
señala que a nivel mundial 1 de cada 10 adultos tiene algún grado de daño
renal; pero también lo pueden sufrir los niños. Tenemos la obligación de
cuidarlos, porque son indispensables para la vida.
Es evidente que la prevalencia de la enfermedad renal
crónica está en directa relación con el número de casos de diabetes e
hipertensión arterial, allí tenemos que dirigir los esfuerzos a luchar contra
los factores de riesgo de estas enfermedades. Actualmente existen el mundo más
de 340 millones de diabéticos, para el 2025 se espera que sea el doble; lo cual
nos señala una mal pronóstico para los riñones, porque las estadísticas señalan
que cerca del 40% de los diabéticos desarrollan enfermedad renal y por otro
lado casi mil millones de personas en el mundo tienen la presión arterial alta
y que la coexistencia de diabetes e hipertensión en una misma persona es
frecuente: sin olvidar que la población mundial está envejeciendo, siendo este
otro factor para la alteración de la función renal; no es nada alentador lo que
estamos señalando, pero conociendo los factores de riesgos de estas
enfermedades y los otros factores que dañan al riñón podemos unir esfuerzos en
la prevención, porque más que un problema médico es un problema social, un
problema de Estado y todos tenemos responsabilidad en la lucha para evitar su
aparición.
Píldoras de tu médico
Las 8 reglas de oro para el cuidado de tus riñones:
1. Mantenerse en buenas condiciones y activo: un régimen
adecuado de ejercicios contribuye entre otras cosas a reducir la presión
arterial y el riesgo de enfermedad renal crónica
2. Mantener los niveles adecuados de azúcar en la sangre: la
diabetes produce daño renal, pero este puede detenerse si hay un control a
tiempo de la enfermedad.
3. Controlar la presión arterial: la hipertensión es la
segunda causa de enfermedad renal crónica.
4. Comer sano y evitar el sobrepeso y obesidad: reduzca el
consumo de sal y baje de peso.
5. Mantener una ingesta de líquidos saludables reduce el
riesgo de piedras en los riñones.
6. No fume: el tabaco daña la circulación renal y causa
hipertensión.
7. No se auto medique esteroides, aines y algunos
antibióticos.
8. Si tiene diabetes o hipertensión arterial debe revisar
periódicamente su función renal y acudir a control con un nefrólogo.
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